Percepción de familias con un integrante con diagnóstico de TEA 

La profesora investigadora Marcela Rábago de Ávila, adscrita a la Unidad Académica de Ciencias Sociales de la UAN estuvo de invitada en el programa “Parlantes” junto con un equipo de estudiantes nacionales e internacionales que participaron en el programa Delfín este verano 2025 con un proyecto interesante sobre el TEA (Trastorno del Espectro Autista). 

El TEA es una condición neurológica que se presenta en distintos grados y con características variables. Aunque suele asociarse principalmente con dificultades en la comunicación y el contacto visual o afectivo, los expertos precisan que su diagnóstico no siempre es temprano. En algunos casos, los niños desarrollan el lenguaje de manera normal, pero posteriormente muestran un retroceso en sus habilidades comunicativas. Otros presentan movimientos repetitivos o conductas de autorregulación que pueden ser malinterpretadas como falta de atención o problemas de conducta.

Los investigadores subrayaron que no existe un tiempo exacto para confirmar el diagnóstico, y que el pediatra, en la mayoría de los casos, carece de herramientas suficientes para identificarlo de forma temprana. Generalmente, es necesaria la intervención de un neurólogo y la realización de estudios como electroencefalogramas o mapeos cerebrales.

Además, señalaron que el grado de apoyo que requiere una persona con TEA varía significativamente: algunos logran altos niveles de autonomía, mientras que otros necesitan asistencia más compleja. Este proceso implica ajustes no solo dentro de la familia nuclear, sino también en la familia extendida y en el entorno social. Sin embargo, la falta de sensibilización provoca que muchas familias enfrenten estigmas y aislamiento.

En este contexto, también se destacó la presencia del capacitismo, una forma de discriminación hacia personas con discapacidad o condiciones diferentes, como el TEA. Bajo el modelo social, el problema no radica únicamente en las limitaciones de la persona, sino en un entorno que carece de accesibilidad e inclusión. La infraestructura hostil y la ausencia de espacios diseñados para todas las personas representan barreras que impiden el desarrollo pleno de quienes viven con esta condición.


Por Ale Castillo

Si quieres escuchar el episodio completo de Parlantes, da clic en este enlace 

https://open.spotify.com/show/5cZvExwzZD6hcrPWFWsArL


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